Ni presencial, ni virtual: ¿por qué la Ciudad de Buenos Aires decidió suspender por completo las clases?

La Ciudad de Buenos Aires anunció ayer que adoptará las restricciones estrictas por nueve días que anunció el presidente Alberto Fernández y confirmó la suspensión de clases durante la próxima semana. Esta mañana, la ministra de Educación porteña, Soledad Acuña, explicó por qué decidieron no dictar clases en lugar de aplicar la virtualidad y brindó detalles de como se reacomodará el cronograma.

«Nosotros estamos convencidos que la presencialidad no puede ser reemplazada por la virtualidad. Por eso, como quedan solo tres días hábiles decidimos suspender las clases y recuperarlo más adelante», manifestó el diálogo con Radio Continental. Además, subrayó que con el retorno a las aulas notaron «una diferencia enorme en los aprendizajes y la evolución en el estado anímico de los chicos».

«La virtualidad es un complemento que llegó en la pandemia pero no es algo que todos los chicos puedan acompañar y menos sin organización, como en este caso», precisó al momento de justificar la suspensión. De este modo, los días perdidos se recuperarán el lunes 20, martes 21 y miércoles 22 de diciembre cuando «haya más calor, así evitamos las jornadas de invierno», ahondó Acuña.

«Era lógico cerrar las escuelas»

A su vez, la funcionaria de Horacio Rodríguez Larreta volvió a reafirmar que «la escuela con protocolos es un lugar seguro» y que «no es un lugar en donde los contagios se propagan», aunque reconoció que «tampoco es un lugar de contagio cero porque se pueden no cumplir los protocolos y romper las burbujas».

No obstante, manifestó que la decisión de volver a cerrar las aulas surge a raíz de que, en esta oportunidad, a diferencia de las últimas restricciones todas las jurisdicciones decidieron profundizar los cierres. «Con todo cerrado era lógico cerrar las escuelas. Antes las restricciones no habían llegado a este nivel», expresó la funcionaria y celebró el acuerdo conjunto entre las distintas jurisdicciones.

«La sociedad necesita estas señales por parte de la política. Por eso, acompañar con la educación de esta forma era la mejor manera sin poner los aprendizajes en juego», continuó la ministra de Educación porteña.

Vacunación a docentes

Mientras tanto, el Gobierno de CABA busca avanzar en la vacunación docente en medio de los reclamos de los gremios que salieron a la calle para pedir más dosis para el sector educativo. En los próximos días se espera un ingreso importante de inoculaciones que permitiría acelerar el ritmo de inoculación y ganarle a la llegada del invierno.

De acuerdo a las cifras del Ministerio de Salud porteño, al día de hoy se empadronaron 45.839 docentes y no docentes para ser inmunizados, de los cuales solo se vacunaron 17.860 hasta el momento. «En este momento estamos empadronado a la segunda camada de todo el personal de la educación de entre 55 y 59 años. Vamos a ir bajando por edad», precisó.

«Entendemos que si el ritmo de entradas de vacunas es el que prevé el Gobierno nacional suponemos que a mediados de junio tendremos vacunados a todo el personal de educación», adelantó la ministra de Educación porteña.